Un reino bajo la luna es drama estadounidense con toques humorísticos del año 2012 dirigida y escrita por Wes Anderson (The Grand Budapest Hotel, Fantastic Mr. Fox) y Roman Coppola en este último cargo.
La película posee un reparto coral, es decir, carece de personajes principales definidos y predispuestos, en cambio la agrupación de estos, su desarrollo en el relato -el cual puede o no relacionarse entre si- es lo que coge protagonismo. Podemos ver en acción a actores de alto renombre como Bruce Willis, Bill Murray, Tilda Swinton, Edward Norton y Jared Gilman.
El film nos cuenta la historia de un huérfano de doce años (Sam Shakusky) que pertenece a un grupo de scouts, el cual aparenta no llevarse muy bien con sus pares y a su vez pasa desapercibido por los adultos. Cansado de pertenecer al régimen, decide fugarse con Suzy Bishop (amor de correo). El jefe veterano del campamento y los padres abogados de la joven, al percatarse de la ausencia de los suyos dan aviso a la policía para encontrar el paradero de los fugitivos. Geográficamente hablando, la película transcurre en una isla no tan poblada y de difícil acceso, lo que complica aun más el rescate. Luego de una serie de obstáculos, llenos de risas sutiles. dramas reveladores, y climas hostiles se logra dar con los jóvenes enamorados, asumiendo un nuevo desafío.
Making of:
Fueron 16 millones de dólares los que se necesitaron para llevar a cabo esta película. Por otro lado fue rodada en diferentes lugares de Estados Unidos, como por ejemplo, la isla Prudente, la cual se encuentra en la bahía de Narragansett y que tiene la particularidad de no estar edificada, punto importante para el planteamiento geográfico del largometraje. Para las escenas del faro, de la iglesia, entre otros, se usaron locaciones como Rhode Island y Manhattan. El reparto en su mayoría está constituido por pre-adolescentes y un resumido y conciso grupo de adultos, el cual sugiere -a simple vista- un espectáculo para todas las edades pero que en el fondo comparte una experiencia para espectadores más maduros. Una de las cosas que más cabe destacar en este proyecto es la gama de colores que se hacen presentes, es como si toda la película estuviera representada por la misma paleta de colores, bien escogida y elaborada pues nada es fortuito aquí, la estética es maravillosa, es como comer el pastel perfecto, suave y consistente, como mazapán, todo gracias a Robert D. Yeoman quien es el director de fotografía. ¡Aplausos para él!
El making of nos muestra primeramente un extracto del tráiler y enseguida vemos a Murray que comienza a hablarnos sobre su personaje y el trabajo de Anderson, mientras aparecen escenas del equipo de filmación haciendo lo suyo. Luego vemos al escritor Roman Coppola, al actor Jason Schwartzman, Edward Norton, Bruce Willis, entre otros comentando el tema de la película y sus implicaciones; la habilidad de Anderson para pensar en los detalles, su visión y pensamiento creativo.
Si bien no pertenecen al making of mismo, existen unos vídeos en los cuales se evidencia todo lo que ocurre detrás de cámara, como el manejo de cámaras, fierros, cables, micrófonos, luces, pantallas, sugerencias del director y ensayos y errores. Esto hace notar la dedicación que le colocó Anderson a su película y los diferentes roles que existen en un grupo realizador:
https://twitter.com/FelipeEspinozan/status/712823208441999360
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