lunes, 16 de mayo de 2016

Cine Chileno [Mauricio Hernández]

KILTRO

 

Con la pésima dirección del director e guionista chileno Ernesto Díaz Espinosa, la tenue producción de Derek Rundell y la actuación especial de nuestro protagonista y experto en arte marciales Marko Zaror, juntos entre todos  lo muchos extras que estuvieron y murieron (ficticiamente, obviamente) que descansen en paz sus mutilados cuerpos.


En fin esta cinta se estreno en el año 2006, su genero se basa en la acción e artes marciales y tuvo una inversión inicial de 4.000.000 millones de peso, una cifra realmente pequeña para un film que no recupero el dinero gastado por lo privados que confiaron en el proyecto audiovisual.


SINOPSIS

¿Te gustan las películas del maestro Bruce Lee? ¿Eres un aficionado de las artes marciales dentro y fuera de las paredes del cine? Pues entonces prepara tu asiento, lleva un pañuelo para limpiarte el rostro de la sangre de los enemigos de el Kiltro y disfruta de una realización cien por ciento chilena la primera en escoger el estilo de las artes marciales en Chile e latinoamerica.



CONTEXTO DE PRODUCCIÓN

Debo ser sincero, este tipo de película en Chile no se ven a diario, supongo que ha sido un gran esfuerzo lograr armarla y realizarla con tan bajo presupuesto, de básicamente cuatro privados que confiaron, pero no lo suficiente en la ambición de Ernesto.

Nos queda por preguntar entonces ¿Cómo lo logró con la cantidad de cuatro millones de peso, pues bueno no hay que ser mago para responder dicha pregunta, pues se nota, pero a por montones cuando usa estudia y de muy baja calidad, pues me parecen más sacado de una obra de teatro por sobre una que intente siquiera llevarme a una diegesis y no sacarme de ella, así que lo del presupuesto no lo supieron llevar ¡Es que tampoco pudieron lograr mucho con la cantidad que le dieron!
En fin, se respeta la innovación y queda más que claro que fue un proyecto hecho con el amor de un fanático de las películas de kun fu antiguas, es decir, las referencias están a la vuelta de la esquina es cosa de ponerle atención.


ARGUMENTO

Si tuviera que decir una sola palabra para describir esta película, pues diría que “Amor” ¿Curioso o no? Si pues la escuche tantas veces que casi demando a la cinta por intento de homicidio en contra de mi pobre oreja no tan romántica.

Pues bien, le contaré de lo que trata más menos, un joven impulsivo, callejero, agresivo pero un enamoradizo que no sabe cómo conquistar a una jovencita coreana que vive en Chile pero va al “colegio” vestida como en Asia se visten las estudiantes (Curioso), en fin el tema principal es el camino del héroe para rescatar a su chica de las garras de un despechado.

¿Ha debo continuar? Pues eso es todo, mucho argumento no tiene, de hecho ¿Por qué duró una hora y media? En fin, eso es todo lo que hay, una simple historia que cualquier tipo con una imaginación limitada podría crear.


VISIÓN GENERAl

¿Te gusta el Karate?  Esas grandes aventuras del viaje del héroe típicas de los relatos audiovisuales de Hollywood, bien, no es de la misma calidad, pero tampoco hablamos de algo a una distancia de años luz.

Seré sincero y eso no es traicionar a la patria sino criticarla para mejorarla, la verdad es que las escenas de las batallas son simplemente geniales, de hecho no parecían haber sido de aquí, de este largo y angosto país, pero lo fueron, de verdad les agradezco por eso, sin embargo y he aquí el Pero que todos morbosamente esperaban, solo aquello fue lo bueno, pues la historia principal no tenía un sentido verdadero, el antagonista era malo ¿Por amor? ¿De verdad? ¿Es enserio? ¡Vamos que no tenía un motivo real! Además , el héroe o protagonista en su largo y tedioso pero muy simple viaje se transformó por que literalmente perdió la memoria, que tontería más grande, sin contar que él o la  directora de arte no se dio la molestia de hacer bien su trabajo, pues si lo que deseaba era  generar un contexto situado en la realidad del bajo mundo en Santiago, entonces, fracasó, en fin solo les debo indicar que es mejor que no la vean, no posee sentido alguno más que mostrar el pretexto imperfecto de las artes marciales.


Alumno: Mauricio Hernández.





No hay comentarios.:

Publicar un comentario